Damos por sentado que la vejez, es sinónimo de enfermedad y deterioro.
Si bien es cierto que la genética tiene que ver, no lo es todo.
Hay muchas enfermedades en los ancianos ( y no tan ancianos), que podrían haberse evitado. La mayoría de ellos, viven o sobreviven a base de medicamentos, que los sostienen y les alargan la vida, pagando un alto precio. Ya que esos medicamentos les harán enfermar de otras enfermedades o empeorar las ya existentes, pero nadie echa en cuenta esto, porque claro: ¡es que son mayores y es lo que toca!
He trabajado durante más de 20 años con personas mayores, he visto enfermedades que se repetían en la mayoría de ellos y como sus creencias limitantes y su soledad, incrementaban sus males.
¡Pues yo me resisto a esto! No quiero pensar que con 60 años se acaba mi vitalidad, mi salud y mis ganas de vivir. No voy a resignarme a pensar que tiene que ser así. De echo, no lo es.
Si nutres tu cuerpo desde dentro, con alimentos crudos, llenos de energía y nutrientes, consigues que los procesos de oxidación propios de la edad, sean más lentos y no tendrás tantas enfermedades. Recordad que contra más alcalino comamos, menos acidificado y tóxico tendremos nuestro cuerpo.
No quiero decir que para conseguirlo solo tengamos que comer crudo, que sería lo ideal, si no que deberíamos incluirlos en un 80% en nuestra dieta y evitando en lo posible, los tóxicos que siempre os digo.
A nivel emocional, también es importante cuestionarse creencias limitantes, los «es lo que hay», los «es mi obligación» y los «porque se ha echo toda la vida», que si quieres verlo, te darás cuenta que no siempre es lo correcto, ni lo que te hace feliz a TI.
Si quieres solucionar alguna enfermedad, antes de que seas mayor y ya sea irreversible, ponte en contacto conmigo. Te ayudaré a cambiar de hábitos alimentarios para que goces de más energía y salud.
Cuida tu cuerpo, cuida tu mente y escucha a tu alma.
Mucha salud y buena vida💚